Mojácar

III Torneo de ajedrez intercentros de Mojácar

Vigente.

 

 

 

Se ha celebrado en Mojácar el III Torneo de Ajedrez Intercentros Mojácar que reúne a jóvenes jugadores de centros de enseñanza primaria y secundaria de los municipios de Carboneras, Garrucha, Mojácar, Turre y Vera.

El torneo se disputó en las Instalaciones del Instituto de Enseñanza Secundaria Rey Alabez de Mojácar y contó con 35 jugadores, de 20 países diferentes, incluidos suplentes, que la lo largo de la mañana fueron compitiendo por los primeros puestos en las dos ligas previstas en el torneo.

Hubo diplomas para todos los participantes y premios para los vencedores de ambas ligas: un espléndido tablero de ajedrez con sus fichas para seguir practicando y otro más que se sorteó entre el resto de jugadores.

Este año, los campeones fueron Wentao del IES Mediterráneo y Diego, del IES Rey Alabez, aunque todos fueron ganadores, al menos de una mañana divertida y de una comida con los compañeros e instructores que culminó el esfuerzo de todos ellos.

Desde sus comienzos, hace más de cinco años, este encuentro entre jóvenes ajedrecistas ha sido organizado por ATAL, Aulas Temporales de Adaptación Lingüística, que regula las actuaciones destinadas a la acogida del alumnado inmigrante, a la educación intercultural y la enseñanza del español como lengua vehicular del proceso de enseñanza y aprendizaje.

Ana Jiménez Lagos, profesora de ATAL en el Instituto de Mojácar, y el “alma mater” de los equipos de profesores que se han ido creando en el resto de los centros participantes de la Comarca, señala y da especial énfasis al verdadero objetivo de este torneo: convivencia, integración e inclusión.

Al comienzo del curso, explica Ana Jiménez, llegan a los centros muchos niños que ni siquiera saben hablar español. Sin amigos, sin posibilidades de comunicarse, fuera de su entorno y su cultura, la integración al resto del alumnado se hace casi imposible.

Algunos simplemente son extraordinariamente tímidos, tienen alguna pequeña discapacidad, todos son acogidos con los brazos abiertos.

El comienzo en las clases de ajedrez iguala a todos frente al reto de aprender un lenguaje común: el movimiento de las fichas a través del tablero y las diferentes estrategias para desarrollar el juego.

La ventaja de estas clases también reside en la incorporación de niños locales en las clases de ajedrez que introducen a los nuevos alumnos con el resto de los compañeros. Al poco tiempo hacen grupos, amistades, se conocen, han convivido. Ventajas que se suman a la práctica del ajedrez en sí mismo, ya que favorece el desarrollo de las aptitudes mentales y esta demostrado que es de gran ayuda en el estudio de las disciplinas escolares, especialmente las matemáticas.

El III Torneo de Ajedrez marca el punto final de las clases de ajedrez y el comienzo del aula de poesía así como el estudio de la Alhambra que culmina con una visita guiada.

Un trabajo extraordinario que Ana Jiménez y su equipo desarrollan en nuestra comunidad y que ven recompensado cuando los jóvenes más desprotegidos se lanzan a la aventura de la vida con el mismo entusiasmo y vitalidad que el resto de sus compañeros.