Mojácar

Mojácar organiza el II Torneo Intercentros de Ajedrez

No vigente.

Alumnos de los colegios e Institutos de  Mojácar, Garrucha y Turre, en un total de 32, han llegado a la final disputada en Mojácar. Los alumnos de Vera ya se están preparando para la próxima convocatoria así como los de La Mojonera.

Este año, se alzó con la victoria ajedrecistas de Garrucha que se disputaron el premio en una emocionante final disputada entre jugadores del mismo municipio.

El torneo ha sido organizado por el Aula Temporal de Adaptación Lingüística, ATAL, en colaboración con los centros escolares  y al igual que el pasado año, no sólo se ha cubierto la capacidad del centro para celebrar la final, sino que han quedado muchos jugadores en reserva. Según la organización, sólo en Mojacar, casi la mitad de los alumnos, a lo largo del curso escolar, dedican su tiempo o sus recreos a la práctica del ajedrez.

Los cruces de jugadas se realizaron por sorteo entre los jóvenes de los distintos centros participantes, que ha visto este año aumentar el número de interesados, tanto por parte de los centros como de los jugadores, aunque el verdadero éxito en ésta convocatoria sigue siendo la integración de niños españoles y los llegados de distintos países. Más de 25 nacionalidades han pasado ante el tablero de ajedrez  buscando un puesto en la final.

Al igual que en la pasada edición, destaca el alto nivel de los jóvenes, el interés y la seriedad con la que afrentan las partidas y los cruces en esta disciplina en la que se implican sin reservas.,

Ana Jiménez, profesora de ATAL en Mojácar y una vida dedicada a la integración y bienestar de las jóvenes generaciones, es la promotora de esta iniciativa en la que ha sabido reunir su afición al ajedrez y a los niños, logrando conjugar el desarrollo intelectual, las habilidades y el estado emocional que ocupa especial importancia en los niños que llegan desde otros países, sin amigos, sin conocer el idioma y, en muchas ocasiones, muy lejos de su familia, su cultura y sus raíces. “Hacer amigos”, insiste Ana Jimenez, lo más difícil para incorporarse plenamente en la normalidad escolar y social.