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Con motivo de la celebración de Santa Cecilia, Patrona de la música, los alumnos de piano de la Escuela Municipal de Música de Mojácar han ofrecido un esperado concierto a sus vecinos.
Como viene siendo habitual, alumnos de la escuela, conmemoran el día de su patrona con una selección musical que este año ha sido al aire libre y con la plaza del Parterre como escenario a tan entrañable acontecimiento.
Bajo la dirección de su profesora, Yolanda Parra Niederhauser, los jóvenes pianistas han interpretado un completo repertorio en el que se incluían piezas tan conocidas como “Carros de Fuego” de Vangelis, “Like Chopin” de Gazebo, “Mariage d´amour” de Richard Clayderman, “River Flows in You” de Yiruma o “Corazón de niño” de Raul Di Blasio, entre otros.
Desde hace varios años, los alumnos del aula de piano, ofrecen dos conciertos anuales: en honor a Santa Cecilia, patrona de la música, y en Semana Santa; ambos muy esperados por los vecinos de Mojácar, grandes aficionados a la buena música y siempre apoyando y animando a sus jóvenes músicos. Para esta ocasión, siete interpretes configuraron el elenco en este concierto, con edades comprendidas entre los 7 y 37 años.
Yolanda Parra es la encargada, desde hace 15 años, de la formación de los más pequeños, entre 3 y 7 años, en el aula de iniciación musical. También es la profesora de piano de la Escuela Municipal de Música.
Para el aprendizaje de este instrumento, uno de los más completos que existe, ya se han matriculado 30 alumnos que asisten a las clases de piano que ofrece esta Escuela
Hay unas pautas estudiadas y preparadas para cada ciclo. Desde los tres años hasta los cinco, se puede asistir a clases de iniciación a la música y movimiento. A partir de los seis, se realiza una iniciación al instrumento elegido, pasando, a partir de los siete años, al preparatorio y de ahí, al resto de las materias que quieran elegir.
Es importante resaltar que cualquier persona interesada, sea de la edad que sea, tiene la oportunidad de participar en la Escuela Municipal de Música de Mojácar y tener acceso al mundo de la música, sin esfuerzo y de una forma divertida y amena
